Fiscalía busca resolver desfalcó que afectaría pago a jubilados y pensionados en Panamá
En Panamá la crisis con los servicios de la Caja del Seguro Social se complican a pesar de los esfuerzos que ha adelantado el gobierno actual para optimizar la calidad de la atención médica.
Se confirmó que inspectores de la Fiscalía Anticorrupción están adelantando auditorías a la plataforma de ingresos y prestaciones económicas conocido como SIPE, donde se han denunciado una serie de irregularidades.
EL 9 abril de 2018, la fiscalía abrió la investigación por un posible desfalco de 300 millones de dólares al Seguro Social. 14 empresas están siendo investigadas por evasión de pagos.
El SIPE es el Sistema de Ingresos y Prestaciones Económicas de la caja, establecido desde el 2012, la plataforma tecnológica fue creada para que los empleadores realizaran sus pagos automáticamente, pero los empresarios descubrieron una falla, que les permitía modificar la nómina dejando de declarar trabajadores, con lo cual la cuota a pagar disminuía, asunto que hizo que dejara de entrar sumas millonarias a la seguridad social panameña y según denuncias, muchos funcionarios ocultaron esto pero cobraban los patronos por mantener oculta la información, así la caja dejó de percibir recursos para pagos a jubilados, pensionados o sobrevivientes.
Al desfalco al SIPE se le suma el caso del fraude en las afiliaciones del seguro social, que destapó la Procuraduría General a finales de abril, donde se investiga a las más de 1800 extranjeros que denuncian haber pagado coimas a funcionarios de la caja para que les emitieran carnes de afiliación al seguro, requisito indispensable para completar trámites migratorios. Los afectados en su mayoría venezolanos que recientemente fueron sancionados por la autoridad de migración de Panamá, con expulsión del país, aseguran haber pagado entre 200 y 300 dólares para obtener el carnet.
El desfalco millonario afecta actualmente el programa de jubilaciones y pensiones por invalidez, vejez y muerte y para tapar este déficit se han comprometido recursos que debilitan la atención de pacientes, y han generado escasez de insumos y falta de mantenimiento de equipos, encerrando el sistema de salud panameño en una situación que ha sido difícil de resolver, y en la que ha tenido que intervenir el parlamento panameño pidiendo la comparecencia de las autoridades de la caja para que expliquen qué fue lo que paso, y hasta del presidente Juan Carlos Varela quien buscando sacar de la crisis a la caja del seguro social, ha instado a las autoridades médicas a redoblar turnos y aumentar la atención para reducir la cola quirúrgica, mientras los asegurados sufren esperando medicamentos, atención y cirugías.