UE aprueba más fondos para Ucrania y critica las condiciones rusas para la paz
Los países de la UE aprobaron este lunes un tercer pago de cerca de 3.500 millones de euros para Ucrania, mientras que la jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, rechazó las condiciones que plantea Rusia para un alto el fuego y acusó a Moscú de “no querer la paz”.
Durante un Consejo de Exteriores en Bruselas, los países de la UE dieron luz verde a ese tercer pago, procedente del fondo de los Veintisiete para Ucrania, consistente en subvenciones y préstamos no reembolsables y destinado a apoyar la estabilidad macrofinanciera y la reconstrucción del país.
Con este desembolso, Ucrania habrá recibido cerca de 20.000 millones de euros en el marco de este fondo desde su entrada en vigor hace un año, indicó en un comunicado el Consejo.
Rechazo a las condiciones rusas
A su llegada a la reunión en Bruselas, la alta representante de la Unión Europea (UE) para Política Exterior y de Seguridad criticó duramente los requisitos que ha exigido Rusia para un alto el fuego en Ucrania.
“Esas condiciones que han presentado demuestran que, en realidad, no quieren la paz, porque están presentando como condiciones todos sus objetivos finales que quieren lograr de la guerra”, indicó Kallas a la prensa.
Los ministros tenían previsto analizar los contactos en Arabia Saudí entre Ucrania y Estados Unidos, de los que Kallas dijo que dan la bienvenida a «las conversaciones generales y su resultado”.
“Ahora la pelota está en el tejado de Rusia”, comentó, y señaló que hay que ver “qué tipo de condiciones están presentando; es una gran pregunta si quieren la paz”.
El ministro de Exteriores de Ucrania, Andrí Sibiga, intervino por videoconferencia ante el Consejo de la UE y subrayó que Rusia “debe decir ‘sí’ de forma clara y sin ambigüedades” a la tregua de 30 días propuesta por EE.UU., que ya ha aceptado Kiev.
En el mismo sentido se pronunció el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien instó a «analizar cuidadosamente la mejor forma de incentivar que Rusia acepte» el alto el fuego en Ucrania y que lo haga «sin condiciones«.
Albares dejó claro que el objetivo es lograr una paz «justa y duradera» en Ucrania y que, para eso, «es necesario que Ucrania siga teniendo el apoyo incondicional de la Unión Europea, como ha tenido hasta ahora».
El presidente ruso, Vladímir Putin, ha respondido a la propuesta de alto el fuego de EE.UU. con una serie de cuestiones y posibles exigencias a las que, según dijo, deberá dársele respuesta para que Rusia acepte bajar las armas.
El líder de EE.UU., Donald Trump, tiene previsto llamar el martes a Putin para abordar la cuestión.
El plan de Kallas y el obstáculo húngaro
Los ministros planeaban debatir además la propuesta de Kallas para aportar a Ucrania entre 20.000 y 40.000 millones de euros de ayuda militar este año, algo sobre lo que también deben opinar los titulares de Defensa de la UE, según la jefa de la diplomacia.
“Es importante que el Consejo haya dicho que hay que actuar con rapidez, y eso es lo que estamos haciendo”, apuntó.
No obstante, varias fuentes diplomáticas coinciden en que ese plan solo se podrá lograr a través de una “coalición de voluntarios”, dada la oposición de Hungría y la necesidad de unanimidad en las decisiones oficiales de los Veintisiete en política exterior.
La propuesta invita a cada Estado miembro de la UE participante a aportar una parte de la contribución militar de la cifra global principal «en función de su peso económico» o su renta nacional bruta.
Preguntado por esa iniciativa, Albares dijo que España «no ha necesitado una propuesta de la alta representante para comprometer 1.000 millones de euros para este año, como ya lo hemos hecho en años anteriores», por lo que seguirá «dando ejemplo» en ese sentido.
Recalcó que de momento no hay ningún posible reparto de las contribuciones fijado por Kallas, y que eso es lo que se debatiría en el Consejo.
Defensa y ampliación
Sobre los esfuerzos europeos por incrementar el gasto militar, la ministra saliente de Asuntos Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, dijo a su llegada que las inversiones para la defensa y la seguridad en Europa también suponen invertir en la relación transatlántica.
La ministra finlandesa de Exteriores, Elina Valtonen, afirmó por su parte que, «si el agresor no depone las armas, no habrá paz», y aseguro que «la pelota está en el tejado de Rusia», pese a que el lenguaje de Moscú «está lejos de la paz».
«Que Rusia concluya su invasión y, después de eso, puede haber conversaciones sobre una paz creíble y duradera», consideró.
