Bukele admite 5.688 homicidios y 2.548 desaparecidos en seis años

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, reveló este jueves que durante su mandato, desde 2019 hasta junio de 2025, el país ha registrado 5.688 homicidios y 2.548 desapariciones. La información fue difundida por el propio mandatario en su cuenta de X, donde afirmó que «durante años, miles de homicidios fueron ocultados como desapariciones», acusando a las pandillas y al antiguo Estado salvadoreño de haber maquillado las cifras.
Según el cuadro de datos compartido por Bukele, entre 2015 y 2018 se reportaron 6.917 desaparecidos y 19.244 homicidios, mientras que en su administración la cifra bajó drásticamente, aunque aún persisten desapariciones.
«Hoy, con menos de 100 desaparecidos al año (antes eran más de 1.500), ya no hay duda: hubo una masacre sistemática oculta, a la par de la que todos conocíamos», escribió Bukele.
El mandatario también reconoció que los asesinatos cometidos por las pandillas «fueron muchos más de lo que creíamos», y planteó como próximo reto nacional la búsqueda de los cuerpos de las víctimas.
Solo en lo que va de 2025, el gobierno ha reportado 38 homicidios y 68 desapariciones, cifras que no son accesibles al público ni a la prensa por canales oficiales, según denuncias de medios locales.
Régimen de excepción y polémica
Bukele atribuye el descenso de la violencia al Plan Control Territorial y al régimen de excepción vigente desde marzo de 2022, que ha permitido la captura de más de 85.900 personas acusadas de vínculos con pandillas. Esta política ha sido respaldada por gran parte de la población, pero también ha generado miles de denuncias por violaciones a los derechos humanos.
El régimen fue implementado luego del asesinato de más de 80 personas en un solo fin de semana. Investigaciones del medio salvadoreño El Faro aseguran que esa masacre fue consecuencia de la ruptura de un presunto pacto entre el Gobierno y las pandillas, que incluía reducir homicidios, pero no las desapariciones.
A pesar de los cuestionamientos, Bukele fue reelegido en 2024 y continúa promoviendo su modelo de seguridad, que para organismos internacionales también funciona como una herramienta de represión y silenciamiento de voces críticas.