Arévalo denuncia nuevo intento de golpe en Guatemala y acusa a fiscal Porras
El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, advirtió este jueves que persisten los intentos de desestabilizar su Gobierno mediante una estrategia orquestada por “actores corruptos”, encabezados —según dijo— por la fiscal general María Consuelo Porras, sancionada por corrupción por EEUU y la Unión Europea.
Arévalo acusa a Porras y al juez Orellana
“Sabemos que los intentos de atentar contra la democracia son continuos. Están desesperados, el tiempo se les agota porque los corruptos van de salida”, afirmó Arévalo durante una rueda de prensa en el Palacio Nacional de la Cultura.
El mandatario señaló directamente a Porras y al juez penal Fredy Orellana, a quienes acusa de liderar una estrategia para anular su mandato mediante procesos espurios.
Ambos funcionarios están vinculados a los intentos de desconocer los resultados de las elecciones de 2023, en las que Arévalo resultó electo.
La Corte frena maniobras golpistas
Esta semana, la Corte de Constitucionalidad (CC) anuló una resolución de Orellana que buscaba declarar vacante el cargo presidencial y le advirtió evitar acciones que constituyan “prevaricato”.
“Estos sectores han recibido un duro golpe con el fallo del tribunal que reafirma que los resultados electorales no pueden anularse”, celebró el presidente.
Arévalo añadió que no fue en vano su mensaje a la nación del domingo pasado, cuando denunció otro intento de golpe de Estado encabezado por Porras y Orellana, y pidió a la comunidad internacional mantenerse alerta.
OEA analiza la crisis guatemalteca
El gobernante confirmó que su país solicitó la sesión especial del Consejo Permanente de la OEA celebrada este jueves, para exponer las acciones que amenazan el orden constitucional.
“No vamos a dejar que los logros del pueblo, de rescatar sus instituciones, sean traicionados por esta banda de actores corruptos”, sentenció Arévalo.
La fiscal general Porras dejará el cargo el 16 de mayo de 2025, y será el propio presidente quien nombre a su sucesor, en medio de una de las mayores crisis políticas que ha enfrentado Guatemala desde el retorno a la democracia.
