Panamá rechaza ser un paraíso fiscal y clama por ayuda para enfrentar crisis migratoria
El presidente panameño, José Raúl Mulino, defendió este miércoles que Panamá no es un «paraíso fiscal» y rechazó su inclusión en listas discriminatorias, al tiempo que clamó por ayuda internacional para enfrentar la crisis migratoria que afecta su país y tiene como hilo conductor la crisis política venezolana, en su primer discurso en la Asamblea General de la ONU.
«Panamá no es un paraíso fiscal ni nada parecido, como si lo son otras jurisdicciones afines a muchos países promotores de estas listas, que son analizados y se miden con otra regla diferente a la de mi país», expresó con énfasis Mulino.
El mandatario panameño, que asumió su mandato de cinco años el 1 de julio pasado, afirmó que es «paradójico» que las naciones que aprueban la inclusión de Panamá en esas listas usan el Canal de Panamá y «participan en licitaciones públicas», entre otros.
Agregó que en razón de ello ha tomado la «firme decisión de no permitir que las empresas de los países que avalan y acompañan esas listas participen en licitaciones internacionales. Tampoco contarán con nuestro voto en los organismos internacionales».
El pasado octubre, Panamá logró salir, por segunda vez en menos de una década, de la lista gris del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), pero todavía permanece en la lista negra de la Unión Europea (UE) de paraísos fiscales.
Crisis migratoria, clamor por ayuda internacional
El presidente panameño habló sobre la «magnitud» de lo que ocurre con los migrantes irregulares que a diario cruzan la peligrosa selva del Darién, la frontera natural con Colombia, en su camino hacia Norteamérica, lo cual es una «inmensa problemática» que enfrenta Panamá por su ubicación geográfica.
Mulino dijo que genera un «dolor inmenso» el drama social de lo que significa este camino improvisado por la selva que es recorrido por mujeres, niños y adultos mayores en una «travesía inhumana».
Ese tránsito de personas, de acuerdo con Mulino, «es liderado por organizaciones criminales, con base en países vecinos, que reciben dinero maldito para lucrar con la necesidad y la esperanza de miles de seres humanos».
«Les pido que vean la magnitud de lo que está sucediendo, porque sentimos que no contamos con todo el apoyo internacional que corresponde para hacerle frente a una situación tan angustiante desde el punto de vista humanitario, tan costosa en lo financiero, tan riesgosa para nuestra seguridad y tan alarmante por la devastación ambiental que nos dejan», remarcó.
La crisis venezolana
Mulino también ligó la crisis migratoria con la crisis institucional que se vive en la región, específicamente en Venezuela, a la que consideró como la causa directa de que millones de venezolanos hayan abandonado su país.
«Cuando existen casos graves de crisis institucional a lo largo del tiempo, tienen como consecuencia inmediata la deserción de sus ciudadanos. Venezuela es un ejemplo concreto», afirmó, citando datos de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados según los cuales «casi 8 millones de venezolanos» ha salido de su país en «desbandada».
Esa cifra «representa una verdadera tragedia migratoria a la que los organismos internacionales no le han dado una respuesta contundente y creíble a lo largo de estos años», manifestó.
Desarrollo sostenible
Y agregó : ¿De qué desarrollo sostenible regional podemos hablar ante esta interminable crisis política que afecta todo el continente? No pretendo disfrazar de verde natural mi discurso cuando hay sangre derramada de inmigrantes que arriesgan su vida en nuestra selva buscando un sueño de libertad. Cuando a su paso contaminan el Darién dejando una estela de destrucción y desolación que a los panameños nos toca recoger, reparar y costear».
«Si realmente hay una preocupación por el desarrollo sostenible, le pido a los países miembros hacer una defensa férrea y establecer mecanismos precisos para revertir el daño producido en el Darién. Me refiero no solo a los daños medioambientales, sino a las causas que lo originan, como el autoproclamado triunfo del actual régimen en Venezuela», dijo Mulino.